sábado, 24 de julio de 2010

bananeras: Infinito aburrimiento

Ahí estaba por fin entregado unos minutos completos de su tiempo incompleto... Me da placer cuando sus manos grandes me mueven con fuerza, cuando sé que aunque quiera no podría moverme.
El tren llego tarde y ya me había sacado los zapatos, esta vez había decidido dejarlo pasar, quería probar solo el viento revolcando mi cabello, sentir el sonido y verlo desaparecer, desaparecer, desaparecer.
Que ausencia, QUE SILENCIO... aturdida me tire en el sillón y no quiero moverme y no quiero escuchar...
Mi tiempo esta girando al revés, me mareo y no logro tomar tu mano.
El tren llego tarde y ya me había sacado los zapatos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario